Así puedes enseñar la Biblia a tus hijos

La Biblia, además de ser la Palabra de Dios revelada a nosotros, es un libro maravilloso: tiene cientos de personajes, historias, versos y enseñanzas fascinantes y creo que es la mayor fuente de sabiduría que existe. 

Uno de los deseos más grandes de cualquier padre cristiano es realmente poder enseñar las grandes verdades bíblicas a sus hijos, ¡pero no siempre es fácil hacerlo! Tenemos grandes desafíos, como: ¿por dónde empezar? o enfrentar el aburrimiento, no tener suficientes herramientas, o que muchas veces nuestros hijos no muestran interés, pero no te preocupes, en este blog voy a compartir algunas estrategias que nos han funcionado para que los niños se enamoren de la Palabra y para que puedan memorizarla.  

Antes de comenzar, permíteme mostrarte a Ezequiel, él es mi sobrino mayor, y juntos hemos podido pasar momentos geniales aprendiendo de la Palabra de Dios.

  1. Mantenlo simple

Muchas veces hacemos cosas muy elaboradas, pensando que tal vez tendrán más recordación o que entre más esfuerzo tendremos un mejor resultado. Esto no siempre es cierto y a veces menos es más. Cuando hacemos cosas muy elaboradas le quitamos esa esencia vivencial de la Biblia. La Palabra de Dios no es algo alejado de nuestro contexto cotidiano, sino que está presente en todo lo que hacemos. 

Así que cuando intentes enseñar versos, o los libros de la Biblia hazlo en momentos sencillos, mientras preparan una merienda, o caminan por el parque, cada cosa de la creación debe poder relacionarnos con nuestro corazón. 

Usualmente acá compartimos un tiempo lindo en la cena, y mientras lo hacemos aprovecho para enseñarle a Ezequiel los primeros cinco primeros libros de la Biblia. Lo hago mostrándole los 5 dedos de mi mano, le digo que cada dedo es un libro (Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio) luego le digo que todos juntos son una familia y que se llaman Pentateuco. Él aún no entiende lo que eso significa! Pero lo disfruta y lo aprende. 

  1. Motívalos a través de la música y la alabanza

La música es algo que florece en el corazón de los niños, y más la alabanza, recuerda lo que dice la Biblia:

¿Oyes lo que esos están diciendo? —protestaron. —Claro que sí —respondió Jesús—; ¿no han leído nunca: »“En los labios de los pequeños y de los niños de pecho has puesto la perfecta alabanza” (Mateo 21:16)

La música de adoración a Dios tiene una chispa que inmediatamente los conecta con su creador, así que tener la canciones o los versos de Pequeños Héroes te ayudará a que los niños aprendan de forma alegre, espontánea y natural. 

En el caso de Ezequiel, encontramos en Youtube un video un poco viejo, pero que tenía una melodía pegajosa para aprender los libros de la Biblia, y fue así que pudo aprender los 66 sin ningún problema.

Recuerda también que la alabanza es mucho más que canciones, empiecen su día dando gracias, adorando y verás como el corazón de tus hijos crecerá enamorado de las cosas de Dios.

  1. Crea hábitos y se intencional 

Los niños, especialmente los más pequeños aprenden mucho a través de los hábitos y las repeticiones, a continuación te hago una lista de pequeñas cosas que puedes hacer diariamente para sembrar semillas que cambien vidas. 

  • Digan un versículo todos los días por una semana
  • Tengan un tiempo de lectura de una historia Bíblica antes de dormir 
  • Empiecen el día dando gracias
  • Oren siempre que consuman alimentos
  • Permite que tus hijos participen cuando tengan interés de tus devocionales o tiempos de oración 
  • Vayan juntos a la reunión familiar de la iglesia 

¿Qué te parecen estas ideas? Espero que te sirvan y que puedan hacer una diferencia en tu familia. 

¡No te canses nunca de sembrar a tus hijos! Ellos son tu legado y tu mayor recompensa.

Santiago Rodríguez Wilches